El interiorista nos cuenta todos los detalles de este proyecto en honor a la Patrona de Vejer
Este año no ha habido procesión de la Virgen de la Oliva, ni traslado, ni fiestas. No obstante, la Patrona inunda las calles del pueblo gracias a la exposición “Oliva Coronada”, cuyo artífice es el interiorista Gaspar Sobrino, uno de los más prestigiosos del mundo.
Madrileño de nacimiento, Gaspar lleva varios años viviendo en Vejer, localidad que le concedió el título de hijo adoptivo.
El proyecto, nos cuenta su autor, está dividido en varias partes: Un vídeo promocional, muy emotivo; una exposición enfocada a la iconografía de la Virgen de la Oliva, sus milagros y procedencia; otra parte que hace alusión al patrimonio y sus pertenencias más representativas y una tercera parte sobre el traslado. Del mismo modo hay a disposición del público una muestra de fotografías en la calle Castrillón en la que se puede sentir y vivir la devoción a la Patrona de Vejer a través de una serie de fotografías sobre la cobijada, la novena, la procesión, el paso de plata o el himno de la virgen, escrito por Antonio Castrillón Pareja, que abraza las paredes del pueblo. Los poemas son de Antonio Castrillón Pareja y Antonio Dorado Soto, obispo de Cádiz.
La intención, dice Gaspar, era la de “hacer algo sobrio y elegante que no quitara protagonismo a la arquitectura de Vejer y potenciara el entorno, convirtiéndolo en un atractivo más”. El objetivo principal de este proyecto, es evitar aglomeraciones, “que la gente del pueblo siga sintiendo que está en Vejer y que aquellos que no conoce la devoción por la Virgen de la Oliva descubran de dónde viene a través de un recorrido explicativo”.
Una exposición que se completará el año que viene con colgaduras en los balcones, un trabajo que han comenzado este año «midiendo balcón por balcón”, y el nuevo alumbrado.
La muestra tendrá carácter temporal para dar a conocer la Virgen de la Oliva, “nuestro mayor patrimonio, lo que nos une, lo que llevamos en el corazón todos y cada uno de los vejeriegos y vejeriegas”, confiesa el alcalde, Francisco Manuel Flor Lara. Todo ello con el fin de crear un museo al aire libre.
El proyecto ve la luz después de dos meses de intenso trabajo y de innumerables horas. Todo parte de una idea que Gaspar Sobrino tuvo hace un tiempo. “Le propuse al ayuntamiento el proyecto hace dos o tres años, pero por diversos motivos no se pudo llevar a cabo y se guardó”. Este año debido a las circunstancias actuales no va a haber ningún acto relacionado con la patrona, por lo que “se sacó del cajón”.
Gaspar Sobrino cuenta con una dilatada experiencia en el mundo del arte y el diseño. Empezó a trabajar en el sector hace 19 años, “tocando diferentes vértices en la profesión”.
Lo suyo con Vejer ha sido una historia de amor en toda regla: “Vejer apareció en mi vida a través de la pintora Blanca Gortari que en un cumpleaños suyo en Madrid me invitó a pasar un fin de semana aquí”. Me enamoré inmediatamente del pueblo. A partir de ahí empezaron a surgir distintos proyectos, “algunos de ellos para el ayuntamiento, que apostó por mí y me quedé”.
Gracias a su aportación al desarrollo turístico de Vejer “el consistorio tuvo el detalle de nombrarme hijo adoptivo de la localidad”. Su fuerte, cuenta, es la restauración, la hostelería, los hoteles y la moda”. De hecho, ha trabajado con grandes firmas como Loewe, Inditex, Lacoste, Armani, Hugo Boss, etc. Vejer, añade, es “para mí es como mi casa, me siento muy a gusto y muy querido”.